Sergio Niklitschek
Presidente Consorcio Lechero
La lluvia y la madrugada fría no son ningún desincentivo para ordeñadores, camperos, técnicos inseminadores, agricultores, médicos veterinarios y agrónomos, por un lado, como para los trabajadores de la industria, transportistas y esa gran cadena de técnicos y profesionales que impulsan al sector lácteo chileno, porque simplemente es el inicio de una jornada de trabajo que los entusiasma y aquí hay vocación y ganas. Esto es lo que deseamos destacar en este Día del Trabajador, jornada que conmemoramos cada 1 de mayo y desde el Consorcio Lechero los saludamos en su día, porque son la base de esta actividad productiva que mueve a gran parte del sur de Chile.
El rubro lechero no es una actividad fácil, pero en retribución, ofrece trabajos de calidad, con buenos ingresos, contacto con la naturaleza, la posibilidad de vivir o estar en el campo y formar parte de un sistema que está en proceso de transformación permanente.
La producción e industrialización de la leche, es una actividad que genera empleos y oportunidades para personas con distintos tipos de escolaridad, formación y vocación. Dentro del desarrollo sostenible, que integran a los componentes económicos, sociales y ambientales, son las personas las que están a cargo de mover esta área productiva, de hacerse cargo del bienestar animal, del manejo de los recursos naturales, de formar buenos equipos de trabajo y de hacer funcionar cada engranaje de este sistema. La primera herramienta para quienes ya trabajan en ella, está en la capacitación permanente, la cual abre vías virtuosas para seguir avanzando y por otra parte, para quienes tienen la oportunidad de buscar un nuevo camino en el área, hay distintas opciones para estudiar y formarse en un oficio o profesión.
Los espacios de desarrollo para las y los técnicos y profesionales en el sector lechero son múltiples, con permanente incorporación de tecnología, como la llegada de la ordeña robótica, la especialización de la producción de leche, la necesidad de ir más allá en el manejo de las lindas praderas de nuestro sur, los equipos agrícolas de alta tecnología, la selección genética de los planteles lecheros y los sistemas computacionales de administración y manejo de datos prediales. De tradicional en esta actividad, ya no queda casi nada, pero de futuro, mucho y cada vez se va a requerir más conocimientos y capacidades.
Es un mensaje para las y los jóvenes, liceos agrícolas, universidades e institutos, es que miren hacia el sector lácteo, porque se abrirán a la posibilidad de desarrollar una carrera con muchas opciones y la recomendación también va para los productores lecheros, para que sean promotores entusiastas de esta hermosa actividad, tanto en sus familias como en el entorno donde se desenvuelven. Con alegría vemos que hoy los productores exitosos están enfocados en crear equipos de trabajo con colaboradores capacitados, motivados y comprometidos y también están preocupados de crear ambientes favorables, incentivando e invirtiendo en las personas y en nuevas tecnologías.